¿Qué cuidados debemos tener con nuestro suelo de parquet?

Conservar y mantener en perfecto estado nuestro suelo de parquet requiere una serie de cuidados que, si se siguen de manera regular, permitirán tener nuestro suelo como nuevo.

En primer lugar, la limpieza es fundamental. Hay ciertas recomendaciones: no usar demasiada agua, utilizar limpiadores adecuados y de calidad, además de impedir la acumulación de polvo barriendo al menos una vez por semana y colocando una alfombra en la entrada de la casa para no traer suciedad de fuera. Es recomendable también emplear felpas o similares debajo de los muebles para protegerlos y evitar rasguños; y quitarse los zapatos lo antes posible, especialmente si están mojados o tienen un tacón fino.

A la hora de cómo limpiar, hay que tener en cuenta si el nuestro es un parquet de madera o un parquet sintético.

Para los suelos de madera, la mejor recomendación en la limpieza diaria es utilizar una mopa o un aspirador con accesorio especial para parquet. Las posibles manchas deben quitarse lo antes posible. Un paño humedecido en agua bastará. Para fregar, puede usarse un poco de jabón neutro y unas gotas de vinagre. Hay que tener cuidado con los productos de limpieza que se emplean en los suelos de madera, ya que ciertas ceras pueden dañar su brillo.

En cuanto al suelo sintético, podemos usar también gamuza y aspirador. Para fregar, puede utilizarse una fregona muy escurrida, ya que el exceso de agua podría hinchar el suelo. En manchas difíciles de quitar un poco de alcohol o acetona ayudará a eliminarlas. Además, en el mercado pueden encontrarse numerosos productos de limpieza destinados a este tipo de suelos.

Los suelos de parquet tienen una gran resistencia y su acabado de fábrica es muy duradero, por lo cual, si se siguen estas sencillas precauciones y recomendaciones de Puertas Sancas, su cuidado está garantizado.