Puertas lacadas: 10 cosas que (quizás) no sabias

Las puertas lacadas son características esenciales en muchos proyectos de acabados interiores, ya que aportan luminosidad, amplitud y elegancia. Estos elementos decorativos brillantes e impermeables pueden ser grandes o pequeños, modernos o antiguos, aunque en cualquier diseño siempre tendrán un aspecto artístico y refinado. Si estás pensando en lacar tus puertas, hay algunas cosas importantes que debes saber para acompañar tu proyecto.

1. Lacar una puerta no es tarea para principiantes

Lacar puertas es una tarea complicada que requiere conocimientos, práctica y conocimiento. Si bien hay muchos tutoriales en línea que explican paso a paso el proceso, es recomendable contratar a un profesional experimentado. Los pintores profesionales cuentan con material y herramientas especializadas necesarias para un trabajo de lacado de calidad. Además, tienen la habilidad para aplicar las pinturas con la cantidad adecuada de espesor sin dejar marcas ni manchas.

2. Puede ser costoso

El lacado de puertas puede ser caro ya que normalmente hay que reemplazar algunas partes de la puerta para proporcionarla con una base nueva antes de lacar. Esto puede incluir la escuadría original, el marco, los adornos y el listón superior. Además, hay una cantidad significativa de pinturas y materiales de acabado necesarios para la tarea. El costo final también depende de la mano de obra necesaria para completar el proyecto.

3. Requiere tiempo para un acabado perfecto

Lacar puertas es un proceso que no requiere solo conocimientos y habilidad, sino también tiempo. Asegurarse de que se utilicen los materiales adecuados, varias capas de pintura y un acabado perfecto es vital para una puerta de calidad. La mayoría de los pintores profesionales llevan entre 3 y 5 días, dependiendo del tamaño de la puerta, para completar la tarea.

4. La cantidad de materiales varía de un proyecto a otro

Aunque el material básico para lacar puertas siempre es el mismo, la cantidad de productos y pinturas puede variar dependiendo del proyecto. Si se va a lacar una puerta nueva con un tono diferente al original, entonces puede ser necesario comprar una mayor cantidad de pinturas. Además, si la idea es mantener el color de la puerta existente, se necesitará una cantidad mayor de diluyentes para preparar la superficie.

5. El barniz no puede aplicarse sobre la pintura

El barniz es una capa protectora aplicada después del proceso de lacado. Proporciona resistencia a la intemperie, resistencia a los rayos UV y alarga la vida útil de la pintura. Aunque el barniz se aplica sobre la superficie de la puerta, no puede aplicarse directamente sobre la pintura, ya que en muchos casos esto podría provocar manchas o perder el brillo. Por lo tanto, es necesario enmascarar cualquier parte que no se vaya a pintar con cinta adhesiva antes de barnizar.

6. Lacar puertas interiores a menudo es más fácil que exteriores

Las puertas interiores se lacan mucho más fácilmente que las exteriores. Esto es porque no tienen que soportar el sol, la lluvia ni los derivados, por lo que el proceso es mucho más sencillo. Además, la mayoría de las puertas internas están hechas de madera y tienen una superficie más homogénea para pulir. En contraste, las puertas exteriores están sujetas a muchas más condiciones y requieren cuidado adicional a la hora de lacarlas.

7. Puedes lavar las superficies lacadas con facilidad

La vida útil de la pintura de una puerta lacada puede oscilar entre 5 y 10 años dependiendo de la calidad de los productos empleados para la tarea. Las superficies lacadas se lavan muy fácilmente con un poco de agua, un trapo y un poco de jabón. Esto permitirá mantener el acabado brillante durante mucho tiempo sin apenas esfuerzo.

8. Será más duradero que pintar

De acuerdo con muchos profesionales del sector, el lacado de puertas es mucho más duradero que la pintura. El lacado puede tardar más en ser completado, pero la mantención es mucho más fácil. Lacar puertas es una buena opción si necesitas que el acabado dure más tiempo y no requiere mantenimiento.

9. Las puertas lacadas se pueden comprar ya hechas

Si el tiempo o el presupuesto limitan el proyecto de lacado de una puerta, hay otra opción interesante. Ahora se pueden comprar puertas ya lacadas directamente a un minorista. Estas puertas son fáciles de instalar y la selección de estilos y acabados está continuamente creciendo.

10. Lacar una puerta puede mejorar su apariencia

El lacado de una puerta puede mejorar su aspecto y su calidad. Es especialmente útil para restaurar puertas antiguas, ya que el proceso sella y consolida el material dejando un acabado liso y brillante. Esto también otorga resistencia a la intemperie y evita la acumulación de suciedad y polvo.

Sería justo decir que hay varios factores a tener en cuenta a la hora de lacar puertas. Además del coste, el tiempo y los conocimientos necesarios para el proyecto, es importante asegurarse de que se empleen los materiales y productos adecuados para un acabado de primera. ¡Ahora que sabes esto, no hay nada que te impida comenzar tu propio proyecto de lacado!