Tipos de parquet

A la hora de poner un suelo de madera en nuestra vivienda hay que conocer los tipos de parquet que ofrece el mercado para que la decisión sea la más acertada. Los tipos de parquet se diferencian en dos aspectos: el material del que está realizado y según cómo se instala.

Tipos de parquet según su fabricación

Si nos adentramos en el aspecto de cómo se ha fabricado, encontraremos dos tipos de parquet: el parquet sintético o laminado y el parquet de madera natural. El parquet natural, a su vez, puede ser de tres tipos: en tablillas, macizo o multicapa.

Tres tipos de parquet:

El parquet en tablillas está formado de restos de piezas de madera maciza más grande y suelen venderse en forma de loseta. El parquet de tarima maciza es la madera en su estado original. Con un grosor que oscila entre los 1 y los 3 centímetros y el ancho entre los 5 y los 21 centímetros, es el tipo de parquet más caro pero duradero. Por último, se encuentra el tipo de parquet natural más económico: el parquet multicapas. Este tipo de parquet está formado por varias capas, una de las cuales es de madera noble mientras que el resto del espesor está formado por maderas menos nobles colocadas de forma transversal para que quede compacto.

La estética de cada tipo de parquet

El tipo de parquet natural, estéticamente, es el que ofrece mejor aspecto. Además de ser el único tipo de parquet que permite ser acuchillado. Por otro lado, el parquet tipo madera sintética o laminado es una opción más económica que el parquet natural, sin embargo éste no puede ser ni pulido ni acuchillado. Por lo que, en el momento que se deteriore se tendrá que proceder a cambiarlo. El tipo de parquet sintético es el resultado de la unión de láminas de materiales prensados que derivan de la madera; mientras que la capa visible es una lámina de melamina que imita la madera.

Clasificación del parquet por tipo de colocación

Si pasamos a la otra clasificación, la colocación, encontramos tres tipos de parquet: parquet encolado, parquet en tarima sobre rasteles y parquet flotante.

El parquet encolado es la forma más tradicional de instalación y consiste en ir uniendo las piezas del parquet sobre una capa de cola a la base. En segundo lugar, tenemos el parquet en tarima sobre rasteles, que para su instalación requiere colocar unos listones que distan unos 50 centímetros entre sí a los que, posteriormente, se clavarán las piezas del parquet perpendicularmente. Por último, se encuentra el parquet flotante que es el más utilizado dado que es la opción más económica y más ágil de instalar. Se trata de colocar una lámina aislante en el suelo sobre la cual, sin ningún tipo de sistema de adhesión, se va colocando el parquet mediante un sistema de encaje entre las piezas.

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